El deán de Santiago, José María Díaz, ha señalado que "hay perspectivas positivas, y muy positivas" en la investigación para recuperar el Códice Calixtino, sustraído hace ya casi un año del archivo del museo de la Catedral compostelana.
Primero se dijo que estaba fuera de Galicia, después lo situaron en el extranjero y, en las últimas semanas, la Brigada de Patrimonio de la Policía trabaja con la hipótesis de que el valioso volumen medieval, robado hace casi un año en Santiago, se encuentre en Galicia y, concretamente, en la misma ciudad que lo ha mimado y cuidado durante cientos de años.
El regidor de Santiago, Ángel Currás, ha intervenido para opinar que "en una investigación de este tipo lo importante no es cómo avance la investigación sino cómo concluya, con la recuperación del Códice". "Cuanto menos se diga cómo va, mucho mejor", ha valorado.
"La experiencia de la policía es que estas cosas suelen aparecer cuando lleva algún tiempo sin hablarse de ellas", ha ratificado el deán de la Catedral compostelana.
La unidad de la Brigada de Patrimonio, que viajó desde Madrid a Santiago para investigar el robo más famoso y extraño ocurrido en la capital gallega en los últimos años, barajó, en un primer momento, que el 'Códice Calixtino', un ejemplar realizado en el siglo XII, podía haber sido robado por encargo y que el autor de la sustracción habría actuado con la colaboración de varias personas. Por eso, no descartó, desde el primer momento, que el manuscrito estuviera ya en el extranjero.
Sin embargo, y tras analizar las grabaciones de todas las cintas de seguridad de la catedral y algunas que se encuentran en el exterior del edificio religioso, las huellas y las pistas recogidas en los numerosos interrogatorios practicados, sus investigaciones comenzaron a dar un giro.
La policía también le pidó al Cabildo catedralicio información sobre planos y telemetrías de la catedral para analizar posibles vías de escape del ladrón o ladrones de la obra de arte y realizó pesquisas en otras ciudades españolas y extranjeras. El objetivo era averiguar, con la colaboración de la Interpol, si se han producido "movimientos" en el mercado negro del arte. Pero, por el momento, y según las fuentes consultadas por ELMUNDO.es del entorno catedralicio, la obra no ha salido de España.
Investigadores. Por eso, la Policía comenzó a centrar sus investigaciones en el entorno investigador y las personas que, durante las semanas previas al robo habían accedido a la sala de investigadores. La Brigada de Patrimonio cree que quien ejecutó el robo contaba con informaciones precisas de la seguridad de la sala de investigadores y de la cámara de seguridad donde se custodiaba el códice.
En las últimas semanas, los investigadores policiales están centrados en entrar en contacto, a través de un intermediario, con el ladrón para pactar su entrega sin que esta joya sufra ningún daño. El temor de los investigadores es que el ladrón, si se ve acosado, opte por destruir el códice. Por eso, están actuando con mucho sigilo y, sobre todo, han pedido la colaboración de religiosos y trabajadores de la catedral.
En un primer momento, la Brigada de Patrimonio trabajó con la hipótesis de que el autor del robo también fuera personal de confianza de la propia catedral. Una hipótesis que no ha abandonado del todo, aunque no es la prioritaria. Precisamente, esta vía de investigación causó un "gran revuelo" en el arzobispado y fue considerado un "disparate" por los principales dirigentes eclesiásticos de la catedral.
Dimisión del canónigo archivero. Fuentes consultadas del entorno de la propia catedral apuntan que esta "tensa situación" provocó malentendidos entre algunos miembros de la iglesia compostelana y que, incluso, tuvo algo que ver en la renuncia de José María Díaz a su cargo como canónigo archivero de la Catedral.
Por eso, el propio Díaz se mostraba esta semana muy animado sobre el posible paradero de la obra y no descartaba que el Códice Calixtino pudiera aparecer en breve. Sin embargo, mostró su temor a que la obra pueda sufrir desperfectos y, por eso, quiso dejar claro que lo importante no es el ladrón, sino la recuperación del manuscrito. "El problema no es tanto encontrar al ladrón, sino el objeto, porque la policía tiene experiencia en que con un ladrón localizado y acosado hay el peligro de que pueda quemarlo o desentenderse del objeto y de lo que se trata es de encontrar el códice", indicó.
La obra. El Codex Calixtinus es una de las más importantes joyas bibliográficas españolas. Para muchos es el primer libro de viajes de la literatura occidental, anterior incluso a Marco Polo. Datado en el siglo XII, está considerado como el más valioso de los códices que se conservan del Liber Sancti Iacobi. Se trata de un códice en el que, además del texto, son realmente importantes sus ilustraciones. Amén de ser una de las más antiguas y mejor documentadas fuentes de información del Camino de Santiago y de las peregrinaciones a Compostela. Valor histórico, bibliográfico e, incluso literario, dado que aporta descripciones de gran realismo y de enorme altura lírica.
Fuente: El Mundo u Europappres
http://novelapapaluna.blogspot.com.es/
ResponderEliminardejo esta interesanta página
Que interesante! Gracias por el aporte, pues, al menos yo, desconocia la existencia de esos libros que intentaré leer.
ResponderEliminarUn saludo.