La cabeza de una antigua estatua romana que pudo ser de la madre del Emperador Nerón ha sido recuperada tras estar desaparecida décadas, dijo el jueves la Policía italiana.
La pieza funeraria fue robada hace entre 25 y 30 años de Pompeya, una ciudad romana que fue sepultada por una erupción volcánica en el año 79 de la era cristiana y ahora es uno de los lugares antiguos más famosos de Italia.
"Es imposible estimar su valor en términos monetarios, pero tanto cultura como históricamente tiene un interés notable", dijo a Reuters el capitán Rocco Papaleo, que dirigió la investigación.
La estatua data de entre el 100 AC y el 50 DC cuando Roma estaba en su máximo esplendor como capital de un imperio mundial y fue hallada tras una investigación en el mercado de arte por un policía militar de Piacenza en el norte de Italia.
El Departamento de Cultura y Arqueología en Parma ha determinado que tiene un "interés enorme" y que probablemente es Agripina la menor, según la policía, que dijo que desconocía el paradero del cuerpo de la estatua.
La emperatriz romana fue una de las mujeres más prominentes de su época y madre de Nerón, un emperador famoso por su brutalidad. Algunos relatos históricos dicen que Nerón asesinó a su poderosa madre.
La Policía dijo que la cabeza de terracota había estado oculta durante años por un dentista en Parma, que intentó venderla pero no pudo porque parecía demasiado evidente que era una obra robada.
El busto fue recuperado después de que un hombre de 62 años intentara venderlo a través de un tratante de antigüedades de Piacenza, de 36 años, quien accidentalmente alertó a la Policía mientras intentaba encontrar un comprador. Ambos están ahora acusados de recepción y posesión de bienes arqueológicos.
Italia ha luchado durante mucho tiempo para proteger su patrimonio arqueológico de los ladrones oportunistas y asaltantes aficionados de tumbas, llamados 'tombaroli', que han alimentado un mercado internacional de obras de arte saqueadas, que genera 6.000 millones de dólares de pérdidas al año, según estimaciones del FBI.
Fuente: El economista
Foto: Terraeantiqvae
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